El PCE-Salamanca apoya las protestas de La Alberca contra el trasvase del Río Alagón

Residencia Mamá Margarita, Béjar

Redacción i-bejar.com
Junio 05, 2008

El Comité Provincial del PCE ha mostrado su apoyo a los albercanos que han mostrado su rechazo al programa de trasvase de agua del río Alagón a la Sierra de Francia. Desde la creación de la Plataforma Cívica Albercana, ya se han recogido más de 800 firmas

La Voz de Salamanca (Roberto Cilleros) / El Comité Provincial del PCE ha mostrado su apoyo a los albercanos que han mostrado su rechazo al programa de trasvase de agua del río Alagón a la Sierra de Francia. Desde la creación de la Plataforma Cívica Albercana, ya se han recogido más de 800 firmas en La Alberca exigiendo a su Ayuntamiento la retirada de dicho programa de trasvase.

En opinión del Partido Comunista de Salamanca, la Junta de Castilla y León ha introducido a la Sierra en un proceso caro e innecesario, un transvase de agua del río Alagón a la Sierra de Francia.

La Agrupación de Salamanca del PCE ha hecho público esta mañana un comunicado en el que muestra su apoyo a los vecinos en las protestas porque consideran que este proyecto conlleva una serie de problemas:

1. Degradación ambiental en el Parque Natural Sierra de Francia, ya que para bombear el agua desde el río Alagón (a 400 metros sobre el nivel del mar) hasta La Alberca (a casi 1100 metros sobre el nivel del mar) supondrá un mayor gasto energético y la construcción de las infraestucturas por donde se traslade el agua.

2. Pérdida en la calidad del agua de consumo: La Alberca es conocida por la calidad y cantidad de su agua, por lo que no tiene sentido la necesidad de trasvasar agua del río Alagón hasta la Sierra de Francia, sino que lo que sí es necesario es mejorar la red de tuberias y crear nuevos depósitos para gestionar mejor el agua del río Francia y de la zona de la Sierra.

3. Incremento de los gastos: el plan obligará al Ayuntamiento de La Alberca, según sus propios cálculos, a gastar cada año casi 30000€, hipotecando al Ayuntamiento, que tendrá que enfrentarse a esa cuota cada año, pero sobre todo a los ciudadanos albercanos, que serán los que acabarán sufragando el gasto.

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