El paréntesis
Viene otra vez el milagro de los carnavales, eso que tanto me asombra de ellos, que consiste en una fiesta con más de 500 años de antigüedad, y que como toda fiesta nació para hacer olvidar las penurias diarias, y sin apenas transmutación alguna sigue fun
José Luis Sánchez-Tosal / Viene otra vez el milagro de los carnavales, eso que tanto me asombra de ellos, que consiste en una fiesta con más de 500 años de antigüedad, y que como toda fiesta nació para hacer olvidar las penurias diarias, y sin apenas transmutación alguna sigue funcionando y cumpliendo como tal, aunque los motivos de penuria hayan cambiado.
Escribir en vísperas o en medio de ellos sobre los problemas, es como tratar de curar a un alcohólico con vino, y material no es que falte, pues la crisis esa que se ha fraguado en Estados Unidos, y que viene dando a todos desde allí está golpeando con la suficiente fuerza como para ocuparse de ella, y creando toda serie de análisis y comentarios, algunos tampoco lúcidos como echar las culpas a Solbes quizá el activo más seguro para tratar de torearla lo mejor posible. En el balcón del Ayuntamiento de Salamanca, el mismo que mostró el más frío vacío que uno puede imaginar, ante la demanda ciudadana para que no se realizase el atropello de las tasas con el agravio comparativo y paralelo de los perdones millonarios, ahora en él ha ondeado la pancarta del archivo, es como de risa. En Ciudad Rodrigo hemos tenido para Bruselas una parte importante de los concejales sin saber claro a qué labores y beneficios han ido, y que durante la procesión del patrono de la Ciudad, una señora tipo Barrio Salamanca engalanada con pieles incitara durante la procesión a un edil del PP "darle leña y fuerte a esos", apuntando a los del PSOE teniendo a Mangas a tiro de oído, no me digan que no es, con todo lo demás señalado anteriormente, como para escribir un artículo de todos y cada uno. Pero nunca mejor dicho, tengamos la fiesta en paz, y respetemos el paréntesis, aun ahora que ya nada se respeta cuando andan intereses políticos por medio, pues al fin y al cabo son por lo que se justifican estos días y para lo que se hacen tantos gastos y esfuerzos de todo tipo.
Publicado en www.ciudadrodrigo.net