Lo que se perdió la "Marea Azul"

La Voz de Salamanca (Gorka Esparza, Isabel Vicario) / Ayer sábado, por primera vez, la Voz de Salamanca se desplazó para cubrir un encuentro del Perfumerías Avenida. Inicialmente los objetivos eran, por un lado, informar sobre el partido, y por otro, seguir a la afición de las jugadoras charras, y compartir con ella la emoción del día y del partido.

Sin embargo, los clubes no fueron capaces de ponerse de acuerdo respecto a la hora y lugar en el que debía jugarse el encuentro. Club Baloncesto León alegaba que a la hora fijada inicialmente, el Pabellón de León estaba ocupado por el equipo masculino de ACB y propuso (fuera de plazo) adelantar el partido a las 17:30.

Avenida se negó a hacer el favor a León de aceptar un cambio fuera de plazo si la modificación suponía adelantar el partido, lo que suponía mermar aún más las condiciones de un equipo que el miércoles había jugado en Siberia.

Consecuencia del desencuentro: el partido de ayer se celebró en un pabellón pequeño -muy parecido al que regenta Maristas en Salamanca- en el que solamente había 350 localidades, un número insuficiente para las aficiones charra y leonesa, que tuvieron que quedarse mayoritariamente en casa, y seguir el partido por la radio. Un partido lleno de rivalidad deportiva puesto que los dos equipos ocupaban hasta ayer el segundo y tercer puesto en la clasificación de La Liga.

No pudimos acompañar a los aficionados del Perfumerías Avenida por las calles de León, luciendo el azul como color, animando antes, durante y después del partido. Ayer la marea azul no estaba en León. Bueno, no exactamente. En las tascas y bares leoneses se dejaban ver los colores del Baloncesto Fuenlabrada, y de “El Fuenlabrada Blues”, una peña que nació en la temporada 1995/1996 y que acompaña a su equipo en cada salida. Franky Calderón, Paco y otros fuenlabreños lucían con orgullo sus bufandas azules mientras degustaban los vinos y tapas en el barrio de El Húmedo de León. "Acompañamos al Fuenla en sus desplazamientos por Castilla y por el Norte" nos explicaba Paco al tiempo que Calderón nos hacía entrega de su tarjeta de visita mientras aseguraba ser amigo de Calderón, el jugador de la NBA. "Hay pruebas que lo atestiguan"… pero no supimos cuales.

Una hora y media antes de que comenzase el partido, nos acercamos al Pabellón de San Esteban. En la puerta nos encontramos con el autobús del Avenida. Unas con cara de sueño, otras con su Ipod, el resto charlando animadamente se van adentrando en el pabellón.

En la puerta los aficionados charros hacían cuentas de cuántos eran para asegurarse de que nadie se quedaría sin entrada. Nosotros entramos sin problemas tras acreditarnos. Sólo Radio Salamanca y La Voz de Salamanca se han acercado hasta León para cubrir el evento. Una pena a tenor del espectáculo que prometía y que luego se pudo ver en el pabellón.

Cuarenta y cinco minutos antes del partido, las jugadoras saltan a la pista a calentar. La afición de León pretende "intimidar" con sus gritos, pero tanto el pabellón como el exiguo número de espectadores hacen que los prolegómenos se asemejen más a los de un partido de liguilla universitaria que de Liga Femenina.

Cuando entran los aficionados charros las jugadoras de Avenida comienzan a animarse. "Aquí está, la afición, del equipo campeón" chillan.

Han venido en coches particulares, saliendo a las 18:30. Tiempo justo para llegar al pabellón. Son Imelda, Pili, Blanca, Isidro, Eugenio, Pepe y Maria del Mar. Algunos conocen nuestra página. Otros prometen leernos.

"Tendremos que gritar mucho porque hemos venido poquitos, pero ya que estamos, nos vamos a dejar la voz" nos dicen.

20:10. La línea ADSL no falla y Roberto Benito conecta con Carlos Andrés (colaborador de La Voz de Salamanca) para contar a través de las Ondas, por Radio Salamanca, otra hazaña más del equipo perfumero.

José Ignacio Hernández llama a sus chicas. Salta el quintento inicial a la cancha, se abrazan y se conjuran. Isa Sánchez grita y anima. En el banquillo, Silvia, Blanca y Sheila se sonríen. Esperan su oportunidad.

A los diez minutos el pabellón parece salmantino. Salvo el bombo de la Peña Leonesa El Metal, sólo se oye a los aficionados charros. Avenida arrasa en la pista.

Paco, aficionado charro le chilla al árbitro tras el espectacular triple de Silvia Domínguez: "Ese no vale tres, vale cinco".

Y llegado el descanso, con 21-46 a favor de avenida, la afición sentencia: "nos podemos ir para casa".

El tercer cuarto pierde intensidad. Salen jugadoras menos habituales. Blanca y Sheila siguen en el banco. Chocan sus manos. "A ver si en el último cuarto…".

Finaliza el partido. Gritos de ánimo en la afición y saludo del equipo. Roberto recoge su micrófono. Las Jugadoras estiran. Nosotros hacemos nuestra ronda de declaraciones.

Al salir nos topamos con Isa Sánchez que nos despide mientras charla con sus excompañeras.

La afición espera al equipo en la calle… "¿alguien me puede explicar por qué está el suelo mojado si no ha llovido?" pregunta una aficionada salmantina.

Mañana te lo contamos… en La Voz de Salamanca.