Huertos solares

Residencia Mamá Margarita, Béjar

Redacción i-bejar.com
Septiembre 09, 2008

Jesús Salamanca Alonso - Licenciado Vidriera

La Voz de Salamanca (Aportación externa) / Jesús Salamanca Alonso

La propia Junta de Castilla y León ha sentado las bases para que la ciudadanía sospeche a su aire tras la chapuza de la concesión de huertos solares. En este momento, en Castilla y León hay una idea clara y es que el tráfico de influencias funciona con suma facilidad en los aledaños del Gobierno Herrera.

Un mes han tardado en dar la cara en las Cortes por el ‘caso Lasarte’ y no lo ha hecho el ínclito Herrera, sino sus ‘escudos’. Así no se trabaja y menos cuando se tiene una mayoría absoluta obtenida por inercia y sin que el votante — y la ‘votanta’, como diría la ministra Bibiana Aído — conozca a quienes le representan. Si León y Castilla se despueblan solos, esta gente que actúa de políticos acabará cerrando la puerta y apagando la luz de la comunidad. Camino de ello vamos.

No hay más que mirar a la prensa de León y Castilla y comprobar cómo en las secciones abiertas de los diarios, la ciudadanía pide a gritos un cambio en la comunidad. ¡Tanto apoltronamiento nos da miedo y nos preocupa! El Partido Popular se ha relajado en exceso, con atrevimiento, desprecio y chulería insultante. Acusa al Gobierno Zapatero de los mismos fallos y desprecios que se cometen en León y en Castilla. ¿Recuerdan aquello de la viga en el propio y la aguja en el ajeno? Pues eso.

Recientemente hemos sabido que Castilla y León es la comunidad más envejecida de España. Nada ha hecho el partido de Herrera por evitar llegar hasta aquí. Ni siquiera ha sabido plantear medidas realistas y mucho menos sentar las necesarias infraestructuras para empezar a ‘levantar vuelo’. El presidente Herrera debería reflexionar por no haber sabido formar equipos comprometidos con León y con Castilla. ¿Y es a Herrera a quien quería imitar Mariano Rajoy si llegaba al Gobierno de la nación? ¡Que el destino nos coja bien asidos y preparados!

Se suele decir que el colmo de la insensatez de un gobierno de derechas es rodearse de funcionarios fieles y que ellos mismos se autoconcedan sustanciosas subvenciones económicas. Pues bien, eso es lo que le ha sucedido al Gobierno Herrera con el ‘caso Lasarte’, donde el presunto tráfico de influencias son la peor bandera que pueden enarbolar ‘Juanvi’ y su Gobierno en este momento. ¡Pobre renta habéis ahorrado, amigos, y peor herencia dejáis!

No han sabido encarrillar el tema de los huertos fotovoltaicos y éste les estallará no tardando, tan pronto como desde fuera se aporten los datos que la Junta no ha aportado. Pero una de las cosas más detestables es intentar desviar la trama de las placas fotovoltaicas o huertos solares con otros temas menores. Actúan como Rodríguez Zapatero, con la misma insensatez, semejante ruindad e igual mediocridad. Lanzan un tema para hacer olvidar otro. Dime de qué presumes…

No nos convenció el portavoz de la Junta en su comparecencia sobre la presunta trama de los huertos solares. Su titubeo y falta de información nos hace desconfiar. Y no solo eso, sino que empezamos a pensar lo mismo que la procuradora del Partido Socialista; es decir, algo se oculta, hay falta de transparencia, no cuadran las informaciones y la Junta reacciona tarde, como con los topillos de antaño.

Viendo al portavoz por televisión nos preguntábamos, no sin cierta sorna, si realmente actuaba como portavoz de la Junta o como ‘vocero’ del Partido Popular. Coincidíamos los asistentes en que la tardanza en dar explicaciones, la falta de comparecencia del presidente en las Cortes, la nula transparencia y la torpeza en la exposición era un acicate empresarial para no invertir en Castilla y León. No faltaron expresiones a nuestro alrededor como: “¡Cualquiera mete un euro en León!”, “¡Que invierta ZP!”, “¡Todo se lo llevan quienes comen de la mano de Juan Vicente, pues que les zurzan de una vez!”,…

Cualquier empresario interesado en la inversión en la comunidad, a la vista de lo que está sucediendo y cómo actúa el Ejecutivo de Herrera, saldría corriendo por temor a que su inversión fuese un sonado fracaso. Cada vez es más digno de alabanza, y además tiene un mérito extraordinario, comprobar cómo contra viento y marea, permanecen en la comunidad grandes empresa sujetando un tejido empresarial que chirría por muchos extremos. Hay que quitarse el sombrero y, de paso, correr a gorrazos la desidia de algunos políticos de medio mandil.

A la vista de lo dicho por el portavoz –- o tal vez simple ‘vocero’ del PP — no nos extraña que el señor Lasarte se haya envalentonado y haya salido a la prensa con declaraciones muy duras y curiosas. Deducimos de sus palabras que la faena no le va a salir gratis al todavía delegado territorial de la Junta de Castilla y León en León, por las nerviosas e interesadas presiones a las que ha sometido a Javier Lasarte y por su precipitación como puntual ‘correveidile’ de los gerifaltes de la Junta de Valladolid.

El portavoz, De Santiago-Juárez, nos ha dejado como estábamos, pero con un mal sabor de boca y un claro agravante: creemos que están intentando tapar vías de agua, buscar conejos moribundos, presentar palomas encapuchadas, vendernos cojas mulas y motos robadas, y tangarnos en todo momento, mientras creen darnos la tetada.

Le vamos a poner unos ejemplos para que vaya haciendo los deberes, señor Juárez. Mire señor portavoz: nos gustaría haberle oído hablar de cierta sociedad limitada, ubicada en una gran población leonesa y sobre quién ha sido su apoderado, según nombramiento de 1994. También nos gustaría saber quién ha sido el administrador solidario de cierta sociedad limitada, desde 2007, constituida en septiembre de 2002, y cuyo domicilio social está en la misma ciudad de León, por poner unos sencillos ejemplos. ¿Es que no sabían ustedes por dónde andaba su gente y con quién se gastaba los cuartos? Si era de dominio público, queremos pensar que también lo sabía su presidente, Juan Vicente.

No se preocupe. Podemos darle más datos si es preciso, aunque creemos que debería aportárnoslos usted, al igual que le instamos a que acuda al Fiscal de León para que determine si hubo, o no, delito alguno. ¿O es que cree que van a ser ustedes los que digan lo que es o no es delito? Confórmense con dilucidar lo administrativo que, a la vista de los acontecimientos, hasta en eso les han tangado. Terminen de hacer sus deberes, por favor, que no tardando les pondremos más.

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