Extremoduro in extremis
Viene siendo habitual que LA VOZ DE SALAMANCA cubra algunos de los conciertos “más destacados” que tienen lugar en nuestra ciudad. Uno de ellos se celebró el pasado viernes 30 cuando Extremoduro, después de varios años alejados de los escenarios, volvía a
La Voz de Salamanca (Felipe Ramos) / Viene siendo habitual que LA VOZ DE SALAMANCA cubra algunos de los conciertos “más destacados” que tienen lugar en nuestra ciudad. Uno de ellos se celebró el pasado viernes 30 cuando Extremoduro, después de varios años alejados de los escenarios, volvía a Salamanca. Lo que, en principio, tenía que ser un trámite (recoger la acreditación) se convirtió en una espera de más de una hora. No es de recibo que un medio, por pocos recursos que tenga, se vea perjudicado por las ineficacias de unos y otros, y le sea imposible acceder a un espectáculo para el que desde el miércoles 28 se encontraba acreditado. Las siguientes líneas contienen tres breves reflexiones surgidas al calor del concierto.
El mito de la eficacia en la gestión privada. Sintetizando mucho. La gestión del Multiusos Sánchez Paraíso la ejecuta una empresa que, en el caso del concierto que nos ocupa, no tramitaba directamente, la acreditación de los medios de comunicación. Según me contaron esta tarea correspondía a la productora encargada de la gira de Extremoduro. El problema está en que alguien no transmitió, omitió o traspapeló la presencia de un medio acreditado desde la tarde del miércoles 28. ¿Mayor eficacia a mayor gestión privada?
El multiuso. Sí, en singular, porque el Sánchez Paraíso se ha convertido, con el tiempo, en un recinto dedicado a un único uso: el festivo. No habría que cuestionarse si es de recibo que una instalación construida con dinero público “sufra”, con la frecuencia que lo hace, las consecuencias de un concierto o una fiesta.
El concierto. Sin lugar a dudas, lo mejor de la noche. A pesar de los avatares antes descritos, y de llegar cuando ya estaba empezado, la conjunción de un buen sonido, un Robe Iniesta “en forma” y de un publico entregado hizo que llegara la madrugada casi sin darnos cuenta. Eso sí, tras tararear algunos de los grandes éxitos de la banda, ya clásicos, como Jesucristo García, So Payaso, Salir, que alternaron con algunos fragmentos del que será su nuevo disco, titulado La Ley innata