Una empresa de Cataluña podría crear 100 puestos de trabajo en Salamanca



Redacción i-bejar.com
Junio 02, 2007

La empresa catalana Tot Plastic con sede en Badalona, esta estudiando la posibilidad de trasladar parte de su producción a la empresa Plasticos Jomeva, debido a la vinculación empresarial entre ambas.

La Voz de Salamanca (M. Santos, Tribuna de Salamanca) / Salamanca parece estar de enhorabuena. Un empresario catalán, dedicado a la fabricación de artículos de plásticos, está estudiando trasladar la producción de su industria en Badalona hasta la capital del Tormes o sus alrededores, lo que generaría 100 nuevos empleos. Germán Ventura, propietario de Tot Plastic, tiene, desde hace año y medio, vinculación empresarial con Salamanca, a través de Plásticos Jomeva, que adquirió cuando estaba a punto de desaparecer.

En la actualidad, las instalaciones ubicadas en la avenida de Las Artes, en la que trabajan seis personas, se dedica a la fabricación del plástico que luego se traslada hasta Badalona donde se manipula. «Ahora mismo estamos gastando 18.000 euros anuales en portes, por eso cada vez estoy más convencido de que lo más adecuado sería trasladarnos a Salamanca, porque me gusta cómo se trabaja aquí y las condiciones de vida que ofrece la ciudad para vivir, porque también pienso en mi familia», explica Ventura.

Para llevar a cabo el traslado de las instalaciones, Germán Ventura necesitaría una superficie que rondaría los 6.000 metros cuadrados, según él mismo calcula. Aunque no se atreve a poner una fecha, asegura que «la idea está muy madurada».

Habilidad en la manipulación

En cuanto a la formación requerida a los 100 trabajadores que desempeñarían sus labores en la fábrica de plásticos, el empresario catalán deja claro «que no necesitan ningún tipo de especialización, es una tarea que se aprende sobre la marcha». Los únicos requisitos que piden cuando contratan un nuevo empleado son «habilidad en la manipulación».

En este sentido, añade Ventura, que «las mujeres suelen ser más hábiles» respecto a los empleados varones, al parecer, menos duchos en la manipulación.

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