Círculo Rosa
La Gaceta trata a la izquierda como si de una enfermedad o un error se tratase. Ser de izquierdas deslegitima para asistir a plenos, participar de la vida publica e interesarse por el bienestar de los ciudadanos y el hecho de que ciudadanos de izquierdas
La Voz de Salamanca (Iñaki Paredero) / Subyace en el articulo una acusación velada: los rojos, todos ellos, están al servicio del PSOE que quiere perjudicar a los legítimos gobernantes de Salamanca. La Gaceta, ademas de señalarnos, de acusarnos de ser rojos, asegura implícitamente varias cosas muy peligrosas. A saber, que ser socialista o de IU significa ser lacayo acrítico, directamente controlado por estos partidos, que si perteneces a un partido no puedes pensar por ti mismo, movilizarte contra una injusticia, militar o participar en otros movimientos sociales, que las protestas contra la subida de tasas e impuestos son una manipulación para perjudicar al PP y en resumen y muy en el fondo, que ser socialista o de izquierdas es como ser homosexual, algo vergonzante, algo a ocultar, algo que te pueden llamar por la calle y ante lo que debes apretar los dientes y bajar la cabeza por que estamos en una ciudad como Dios manda, en una ciudad del Partido Popular.
Así que toca un ejercicio de pedagogía. De la misma forma que salí del armario hace años, creo que va siendo hora de salir del armario político. No, no es que haya negado en ningún momento mi ideología, no. Se sale del armario cuando se hace necesario hablar alto y claro de algo, en este caso decir que eres socialista, no avergonzarte de creer en el progreso y en la igualdad.
Si, soy socialista, que pasa. ¿Algún problema? Y sí, he participado en todas las movilizaciones contra el alcalde, como muchos otros ciudadanos. Y sí, son mis maléficas ideas socialistas, esas que dicen que no esta bien olvidar cobrar 20 millones de euros a los ricos y cobrárselos a los pobres, las que me han hecho asistir y participar, es mas, lo extraño es que alguien que se diga socialista no asista. Y si se entiende que mi asistencia, participación y la revindicación misma no son justas únicamente por el carnet del partido que tengo, creo que alguien, y no soy yo, tiene un grave problema de partidismo.
La política es el arte de cambiar la sociedad, es el arte de mejorarla escuchando y obedeciendo lo que dice la calle. Militar en un partido o en un movimiento social es algo que ennoblece, sí, que te permite luchar por mejorar la sociedad, escuchando lo que demanda la gente de la calle, oyendo sus necesidades y buscando respuestas y posibles cauces de acción en tu ideología que ofrecer a la sociedad. Yo me siento orgulloso de ser socialista como me siento orgulloso de ser gay y ningún dedo acusador o círculos dianas, de los colores que sean, me van a intimidar, hacer sentirme culpable de intentar poner un humilde granito de arena para mejorar esta sociedad.
Quizá a los ojos de la Gaceta esa pagina fue periodismo de investigación, no lo se, pero a mis ojos y a los de muchos otros no fue nada mas que sectarismo si no directamente fascismo. Señalar así, con un circulo, a las personas que participan en los movimientos sociales, en las protestas, en la vida publica, tiene como objetivo intimidar, asustar y deslegitimar unas luchas que, oh casualidad, no les gustan a los señores de La Gaceta. Y es que puestos a poner circulitos, si escogiésemos una foto de la dirección de la Gaceta ¿cuantos miembros del PP encontraríamos? ¿Cuantos miembros del opus o de cualquier otro sector de esa secta que dice que los niños provocan sus abusos sexuales?
Hoy La Gaceta nos reveló su cara mas negra, con brillantes colores. Hoy, marcado con un circulo rosa photoshop, me pregunto todavía por que un periódico de tanta raigambre y tradición ideológica no recuperó viejos usos y utilizó para identificar a este marica socialista, un germánico triangulo rosa.
Las cosas, de verdad, hubieran quedado mucho mas claras.