Caldera ya no es ministro: es la hora de los bejaranos
Editorial número 86 de bejar.biz - Editorial desde Béjar
La Voz de Salamanca / www.bejar.biz
La probabilidad de que un bejarano sea ministro del Gobierno de España es aproximadamente un 3 por mil. En ese sentido, tras la publicación del 2º gobierno Zapatero, se ha impuesto la lógica. O sea lo normal y lo probable es que no haya entre los ministros ningún bejarano.
Podría interpretarse que la ciudad de Béjar ha perdido un activo importante, pero si lo pensamos detenidamente podremos convenir que el destino de la ciudad de Béjar ha estado, está y estará en las manos de los bejaranos. Es seguro que si en la ciudad se conciben y desarrollan proyectos creativos, innovadores, interesantes y se desarrollan de forma profesional y meticulosa, se encontrarán los medios para llevarlos a cabo.
En este sentido y cada día con mayor claridad, parece claro que el destino de un pueblo está más en la generalidad de su colectivo, en su capacidad de trabajo y de diálogo para encontrar su camino, que en algunas individualidades, por importantes que sean, sin desdeñar, por supuesto, el papel que puedan cumplir.
En suma, que ya no tenemos ministro, que por cierto no era el Ministro de los bejaranos, sino de los españoles y que ha sido un buen ministro (eso lo dice ahora casi todo el mundo, incluidos algunos de la oposición, excepto algunos recalcitrantes, algunos de los cuales son bejaranos), lo que nos obliga aun más a dejar de mirar hacia arriba a ver que cae y a pensar que si este pueblo tiene futuro está en sus ciudadanos y no en ninguna persona que pueda venir y de forma milagrosa vaya a solucionar nuestros problemas.