5000 estudiantes protestan en Salamanca contra el "Plan Bolonia"
La Huelga de hoy, convocada por Estudiantes Contra Bolonia en Salamanca, ha sido un éxito al vaciarse la mayoría de facultades.
José A. Andrés / Entre 6000 y 8000 estudiantes según los organizadores y 4000 según la Subdelegación del Gobierno han acudido a la manifestación convocada por Estudiantes Contra Bolonia que ha partido esta mañana desde la Puerta Zamora finalizando ante el Rectorado.
Ni el frío, ni las fiestas de las facultades de ciencias, ni la inicial división de convocatorias, han impedido que los universitarios invocaran los ideales de rebeldía y cultura para todos de Fray Luis de León. La de ayer fue una nueva jornada histórica de lucha en la Universidad de Salamanca.
Manifiesto difundido al final de la protesta
El 27 de marzo de 1572, Fray Luis de León era arrestado por traducir el Cantar de los Cantares a una lengua vulgar sin licencia, prácticamente una herejía en la época, que se castigaba con la muerte. Sólo la autoridad y popularidad de Fray Luis evitó un mal mayor que el de pasar dos años y medio en la cárcel. Dos años y medio en el que él sabía que tenía razón y que estaba haciendo algo justo, algo buen estaba luchando por sus ideales de rebeldía y cultura para todos, pues si tradujo ese libro prohibido es para que otros muchos pudiesen leerlo y aprender de él.
Como decíamos ayer, nosotros nos encontramos aquí porque creemos en una idea, radicalmente distinta a la de Fray Luis pero de enormes similitudes, tanto él como nosotros tememos por el futuro de la Universidad y tememos por la Educación y la Cultura para todos. Él, como nosotros, fue tachado de hereje por el orden establecido. Él, como nosotros, creía en algo mejor para la Educación. Él, como nosotros, luchó con los medios de los que disponía.
El Espacio Europeo de Educación Superior lleva en marcha desde 1999 y, aún a día de hoy, con algunos grados ya implantados, muchos de nosotros no sabemos qué es Bolonia o qué es lo que nos depararán estos nuevos planes de estudio. Si eso ocurre hoy, después de casi 10 años de Proceso, algo ha fallado estrepitosamente. Este fracaso es una realidad, pero antes que pararse a reflexionar sobre aquello que no va bien, los dirigentes de esta Universidad prefieren continuar de espaldas a nosotros, los alumnos, el espíritu y corazón de esta Institución, aprobando reformas, planes de estudios y comisiones sin que el alumno tenga información y capacidad real de participación más allá de un estúpido e inútil papel de observador de los acontecimientos. Bolonia supone el cambio más importante de la Educación Superior que se ha producido en nuestro país; una oportunidad única de construir una Educación crítica y de calidad real, y estamos fracasando.
Algo ha fallado. Algo está fallando y tenemos que ponerle solución, entre todos.
Este Proceso no es bueno y todos lo sabemos. Lo sabe el Rector, lo saben los decanos, lo saben los profesores y lo sabemos los pocos que nos hemos podido informar. Este Proceso supone una enorme devaluación de las titulaciones, convirtiéndolas en meros “conocimientos generales” sobre las materias y empujando al alumnado a hacer posgrados y másteres que costarán cerca de 1500 o 2000 euros por año, haciendo de la Universidad una posibilidad de muy pocos con los recursos suficientes para permitírselo. ¿Y los que necesiten trabajar para pagarse los estudios? Estos tendrán que luchar contra un crédito ECTS, que equivaldrá a 1500 horas de trabajo al año y, por cálculos, unas 8 horas de trabajo al día que dificultarán enormemente la posibilidad de hacer compatibles los estudios y el trabajo.
No todo es malo en Bolonia y lo sabemos. Ya era hora de que se planteara una nueva Pedagogía que fuera más allá de escuchar a un profesor para luego vomitar lo que nos ha dicho en un examen y se aumentase el tiempo de prácticas y trabajo personal de cada alumno. Pero, ¿Cómo va a lograrse eso? El llamado “coste 0” significa que nadie va a poner más dinero del necesario, que nadie va a perder ganancias en la Educación, es decir, la Educación como un negocio, y que todo el dinero para aumentar el número de aulas, de material pedagógico, de libros, etc… saldrá, ¿De dónde? Del bolsillo del alumno a través de sus matrículas y sus tasas. ¿Es esa la Convergencia que queremos? ¿O es la que quieren otros para nosotros?
¿Y cuál es el papel del alumno en todo esto? Ninguno. ¿Acaso os han preguntado lo qué queríais más allá de intentos paternalistas que buscaban un silencio voluntario más que una participación real? No ¿Acaso sabéis cómo será vuestra vida educativa y laboral en el futuro? ¿Alguien ha venido a explicároslo? No, ellos dicen que eso es tarea de los representantes elegidos por los alumnos. Pues si ni los profesores ni los representantes de alumnos os han informado, repetimos que algo falla en todo este asunto y por eso estamos aquí.
Por ello, los estudiantes de Salamanca piden y exigen:
1. La paralización del Proceso de Bolonia.
2. La convocatoria de dos Referendums; por un lado, un Referéndum a nivel de la Universidad de Salamanca, de todos sus componentes, profesores y alumnos en un mismo nivel de decisión para saber el grado de conocimiento y aceptación de este Proceso por aquellos que se ven afectados por él. Y también un Referéndum en cada facultad como condición para que el grado se apruebe y se implante. Entendemos este Referéndum como un instrumento, un medio de participación real y directo del alumno sobre este Proceso que obligue al poder establecido a informar y hablar con el alumno, cosa que no han querido hacer hasta ahora.
3. Un debate abierto de todos los alumnos que quieran participar en él con el Rector en el que exponer nuestras preocupaciones y preguntas del mismo modo que el Rector de la Complutense accedió a hablar con los alumnos de esa Universidad. Queremos información transparente y activa por parte de todos los órganos de esta Universidad.
4. Que ningún grado se implante en bloque como ocurrirá, por ejemplo, en las carreras de Historia, Geografía, Biología o Traducción. No se puede implantar un nuevo plan de estudios a aquellos que han elegido otro para realizar sus estudios.
5. Una paralización del Proceso de conversión del Curso de Adaptación Pedagógica (CAP) a un máster de 1 año y miles de euros. Entendemos que este curso debe replantearse y que tiene deficiencias, pero no de esta manera.
6. Un replanteamiento de todo el Proceso de adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior en el que el alumno tenga real capacidad de decisión. Un replanteamiento, pues, de todo el sistema de representación de los alumnos de esta Universidad, con un aumento del poder real del alumno y de su capacidad de decisión.
7. Una congelación del aumento de las tasas universitarias, o, al menos, hasta que esto ocurra, un compromiso firmado del Rector de la Universidad de Salamanca, de que su aumento será el mínimo establecido por la ley todos los años. Nuestro objetivo es clar queremos una Universidad pública y gratuita, palabras que son sinónimos aunque ellos no lo crean. También exigimos más becas a fondo perdido y eliminación de todas las becas-préstamo o préstamos-renta que, entendemos, no son becas.
8. Un replanteamiento del Crédito ECTS y su precio, sobre todo en los posgrados y másteres.
9. Prohibición de acuerdos económicos entre la Universidad Pública y las Empresas Privadas. La decisión de trabajar para una Empresa es del alumno y el ámbito privado no debe entrar jamás en el ámbito público.
10. Un Universidad Crítica, Pública y Gratuita que vele por la Educación y sea el orgullo de todos aquellos que componemos esta Institución.
Sólo hasta que consigamos este último punto nos daremos por satisfechos. Con esto os anunciamos que las movilizaciones no terminan aquí. Habrá más y esperamos que mejores y con mayor apoyo si cabe, tal vez más pronto de lo que el Rector querría, y esperamos que todos vosotros apoyéis esas movilizaciones cuando se produzcan. La lucha no termina y sólo queremos decirle al Rector, a los Decanos y al Gobierno que aquí nos tienen cuando quieran empezar a hablar de verdad y no a través de los canales que ellos han inventado paternalmente para nosotros y que consideramos que no son ni buenos ni efectivos.
Estamos convencidos de que Fray Luis de León, si viviera, estaría escuchando este manifiesto, con nosotros, luchando por lo que es justo contra viento y marea. Si Fray Luis de León viviera gritaría con nosotros: ¡NO A BOLONIA!
Comunicado de Estudiantes Contra Bolonia
La Huelga de hoy, convocada por Estudiantes Contra Bolonia en Salamanca, ha sido un éxito al vaciarse la mayoría de facultades, estando completamente vacias las Facultades de Geografía e Historia, de Sociales, de Filología, de Ciencias, y con una afluencia escasa en el resto de centros. Los grupos de estudiantes que pasaban por las facultades para informar la hora sobre la manifestación certificaron este hecho en la mayoría de facultades, excepto en las de Farmacia y Enfermería, donde los guardias de seguridad privada de la Universidad no permitiendo el acceso a los alumnos de las facultades a porrazo limpio, y quitándose las placas identificativas, impidiendo a los compañeros agredidos emprender acciones legales contra los agresores. Asimismo, la afluencia a clase entre los estudiantes de la ESO y los de bachilleratos las clases han estado completamente vacias.
En cuanto a la manifestación, desde Estudiantes Contra Bolonia consideramos que puede considerarse un éxito completo, al ser la mayor movilización estudiantil desde la lucha contra la LOU. Dicho éxito, plasmado en la participación de entre 6000 y 8000 estudiantes (4000 según la policía local), se debe al procedimiento y la metodología aplicada en la convocatoria de la movilización, es decir, el proceso de asambleas abiertas por facultades donde los estudiantes se han informado, han debatido, y han organizado ellos mismos la campaña informativa. Desde Estudiantes Contra Bolonia seguiremos con las movilizaciones ya que nuestras demandas han sido rechazadas por el rector en una reunión mantenida con él posteriormente a la manifestación, además de dejar claro que «nunca, nunca, nunca negociará con Estudiantes Contra Bolonia».
En las próximas asambleas decidiremos cuáles van a ser nuestras próximas acciones, ya que queremos dejar claro que no nos vamos ni a callar ni a parar hasta que no consigamos una Universidad Pública y de Calidad, en la que las condiciones económicas no supongan una traba para el acceso y la permanencia.
Fuente: La Voz de Salamanca