El PP pide la dimisión del concejal responsable de La Covatilla

Alejo Riñones acusó, en una comparecencia ante los medios de comunicación a Javier Garrido Novoa, concejal de Turismo y responsable de La Covatilla, de haber diseñado unas bases a medida para contratar a personal en la estación de esquí bejarana. En el mes de enero en comisión informativa, los ediles del PP advirtieron de esta situación al propio Garrido.

El portavoz del Partido Popular se interesó por las bases de contratación para el personal de La Covatilla, según Riñones el nuevo personal “estaba tan seguro de pasar a ser contratado que se le ha visto empezar a trabajar antes de serlo”. El que fuera alcalde, amenaza con ir a la inspección de trabajo o a la fiscalía y pide al alcalde, Antonio Cámara, que “mueva ficha” con la amenaza de implicarle a él directamente "si no quiere verse envuelto en este lio, en esta borrasca”, advirtió Riñones.

Los Populares "no harán nada porque están en campaña", pero dio a entender que tras las elecciones regionales tomarán medidas. En primera instancia aseguró que si toman medidas le puede “costar mucho dinero al Ayuntamiento”, a pesar de lo cual están dispuestos a cumplir sus amenazas una vez pasadas las elecciones.

“Queremos mucho a La Covatilla, hemos sufrido por ella más que nadie, pero no podemos hacernos cómplices de las cosas mal hechas de aquellos que decían que venían a traer aire limpio”, aseguró Riñones quien además expresó su malestar al asegurar que no se le proporciona información relativa a la gestión de la estación de esquí bejarana. Aseguran desconocer ingresos y gastos del 2021, así como la nómina, cuantas personas trabajando en la estación o que se está haciendo para delimitar la zona de Navacarros - El Tremedal, para definir bien la propiedad municipal. Este último es un litigio judicial heredado de la propia gestión de Alejo Riñones.

Riñones insistió en varias ocasiones en reclamar la intervención del alcalde, o serán ellos lo que acudan a Inspección y Fiscalía. “Estaban perfectamente advertidos y sabían lo que podía suceder”, dijo Riñones, que criticó la generalidad de la gestión de la estación de esquí, con 52 sueldos en La Covatilla. 

Postura del equipo de gobierno

Respecto a las contrataciones, aunque no ha habido pronunciamiento oficial, fuentes municipales señalan que las amenazas y recursos del PP poseen un carácter electoralista —el propio Riñones señalo la campaña electoral como plazo para adoptar medidas—, meramente político y que no atiende a razones de verdadera preocupación por el futuro de Béjar.

Las mismas fuentes aclaran, en declaraciones a i-bejar, que las dos plazas recurridas son las de mecánico —que serviría tanto para la estación como para el ayuntamiento— , y al que se le requiere, por razones obvias, experiencia en máquinas de estación de esquí además de mecánica en general y un responsable de explotación. En el caso éste último se aclara que "cualquier persona que haya trabajado en estacionas de esquí puede presentarse” y se le requiere, además de saber esquiar, que haya tenido a su cargo a profesionales en estaciones de esquí y experiencia en el manejo de las máquinas específicas de la estación, alguna de las cuales está siendo infrautilizada al no disponer el Ayuntamiento de Béjar de personas que conozcan el manejo 

Las fuentes consultadas por este medio aseguran que no es cierto que nadie haya comenzado a trabajar en la estación de esquí sin estar contratado y que las acusaciones del PP se deben a razones electoralistas puesto que no poseen ningún fundamento.