Miles de personas disfrutaron un año más del Mejillón Rock de San Martín del Castañar



Redacción i-bejar.com
Junio 26, 2023

Gran acogida, buena música y 700 kilos de mejillones confirieron el guiso de la IX edición de este festival

IX Mejillón rock en San Martín del Castañar

Música, cultura, gastronomía y el buen hacer de los organizadores son los ingredientes para que, edición tras edición, el Mejillón Rock de San Martín del Castañar se haya erigido como referente cultural.

Parte del éxito se debe a la colaboración de decenas de voluntarios, vecinos de la localidad serrana, que le confieren a la fiesta del particular sentido que pretendía y consiguió dotarle el Ayuntamiento y Alfonso Calvo, su alcalde. Tiene el sentido que a los vecinos de San Martín les llene de orgullo estar en el punto de mira cultural y ver sus calles pobladas de turistas y amantes de la música, la gastronomía y las tradiciones.

Fue una cita llena de descubrimientos musicales que se inició ya el viernes con la actuación de una DJ, La Marquesa, en la plaza, para dar la bienvenida a los cientos de visitantes que llegarían a lo largo de todo el fin de semana.

Descubrimientos como Belwis de la Rosa, que con su Rap Rural, deja "cadáveres emocionales" a su paso —parafraseando sus propias letras, sus versos—. La rapera, rural y manchega, animó la plaza a pesar del sol de justicia, que pasado el mediodía impedía a lugareños y visitantes escapar de las sombras. Con su fuerza y su arte consiguió sacar a bailar a todos al sol y a refrescarlos en el pilón del pueblo. Todo después de que lugareños y visitantes pudieran disfrutar de unos Rabioli de Mejillón. Alta cocina, al lado del refrescante Pilón, con la exhibición culinaria del chef y asesor gastronómico, Borja de la Cruz, encargado de guisar también los 670 kilos de mejillones repartidos.

Los preparativos del festival ocupan a la organización semanas, pero la cita se inicia con los primeros acordes y las hogueras desde las 5 de la tarde, con los fogones empezando a cocinar los casi 700 kilos de mejillones que el Ayuntamiento reparte gratuitamente entre los asistentes al festival.

Primero fueron "Dame veneno" que empezaron a animar desde el escenario a los asistentes recién levantados de la siesta, tras el terremoto manchego de la plaza. Rumba, Rock Calorro y animado, para ir abriendo la boca de nostálgicos y no tanto.

Entretanto se iba llenando la plaza para recibir a "Cisco Folk", música folk que casa bien con el rock, con mejillones de por medio y las magistrales actuaciones tributarias de "Eisi Disi" y "Besos de perro". Los madrileños, en su tributo, versionaron magistralmente los clásicos de la banda de hard rock británico-australiana. Dejaron el listón muy alto con las magníficas versiones de Thunderstruck, Highway to Hell o Hells Bells, entre otros.

A pesar de todo, los reivindicativos "Besos de Perro" versionaron los temas de Marea. Para muchos son "mejor que los originales", con el permiso de los navarros de Kutxi Romero, el mejor elogio que puede recibir una banda que se dedica a versionar los temas de sus ídolos.

La fiesta se prolongó hasta la madrugada, ayudados por las viandas de mejillones primero y arroz con mejillones después, regado todo con quintales de cerveza para combatir el calor cuando los héroes de la organización lograban superar los inconvenientes que surgían en el recinto. De madrugada, muchos optaron por terminar la fiesta en El Chiringuito, en un espacio medieval al lado de las piscinas naturales.

El domingo por la mañana la cita prosiguió con la salida a las 10:00 horas de una ruta motera con los componentes del "Koyote Kojonero", club motero de Miajadas, en Cáceres, que se han convertido en incondicionales de la cita. La ruta recorrió la Sierra de Francia y el Parque Natural de Las Batuecas, para culminar de nuevo en San Martín del Castañar donde los mejillones fueron nuevamente los protagonistas en un nuevo guiso magistral de Mejillones con Garbanzos del Chef Borja de la Cruz.

La tranquilidad, o no, porque ya se organiza la próxima edición, regresó a San Martín tras la marcha de los moteros, los últimos en abandonar la fiesta.