El Procurador exige al alcalde soluciones para la Calle Mayor
El Ayuntamiento de Béjar no contesta a los requerimientos del Procurador del Común, el defensor del pueblo castellanoleonés, después de que la oficina admitiera recientemente a trámite una queja de vecinos y comerciantes de la Calle Mayor por las continuas molestias causadas por los conductores que aparcan sus vehículos frente a las tiendas y a los domicilios, lo que impide el acceso o salida de los inquilinos.
Los vecinos y comerciantes hicieron público su malestar y sus protestas por el trato municipal recibido, que va en detrimento de la actividad comercial y la queja formal ante Manuel García Alvarez contemplaba las consecuencias derivadas de los arreglos realizados por el ayuntamiento en la calle.
DENUNCIA El colectivo denunció el caso omiso del Gobierno municipal ante las continuas protestas vecinales. Estos se refieren, en concreto, a la denuncia, efectuada durante meses, sobre la ubicación de pivotes en la zona, que origina el aparcamiento de los conductores a la misma puerta de las tiendas y de los accesos a las viviendas.
Las señales de prohibido aparcar "semiocultas", según los denunciantes, no retraen a los conductores, ya que continúan aparcando en la zona, algo que afecta comercialmente a algunos establecimientos.
Ahora, un grupo de vecinos denuncia el caso omiso que el ayuntamiento hace a los requerimientos de García Alvarez, que el pasado día 25 de febrero solicitaba del consistorio una serie de informes referidos a la queja de comerciantes y vecinos admitida a trámite. La oficina del Procurador del Común dio a conocer a los vecinos de la Calle Mayor que aún no se ha recibido la información solicitada y que se ha efectuado un nuevo requerimiento al consistorio, interponiendo un plazo de 15 días.
La zona afectada por los aparcamientos incontrolados de los conductores es la comprendida entre los números 3 y 15 de Sánchez Ocaña en dirección a la calle de Solano.