Inaugurada en Salamanca la exposición audiovisual “Espejos en la Niebla”, del cineasta Basilio Martín Patino
La innovadora muestra, que refleja un conflicto entre terratenientes y renteros a principios de siglo en una finca de Salamanca, se exhibió en el Círculo de Bellas Artes de Madrid y contó con una gran afluencia de público. Puede visitarse en la antigua se
La Voz de Salamanca (Claudia Toda) / La innovadora muestra, que refleja un conflicto entre terratenientes y renteros a principios de siglo en una finca de Salamanca, se exhibió en el Círculo de Bellas Artes de Madrid y contó con una gran afluencia de público. Puede visitarse en la antigua sede del Banco de España hasta mediados de noviembre.
Ayer se inauguró en la antigua sede del Banco de España la propuesta del cineasta salmantino Basilio Martín Patino. La muestra está organizada por el Círculo de Bellas Artes de Madrid y la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, adscrita al Ministerio de Cultura, y cuenta con el patrocinio de la Obra Social de Caja Duero. Llega precedida de las buenas críticas recibidas durante su exhibición en Madrid, y del gran número de visitantes que la han disfrutado. Podrá verse en Salamanca hasta mediados de noviembre.
La propuesta se debe al taller cinematográfico del cineasta salmantino Basilio Martín Patino “La Linterna Mágica”, y refleja de manera fragmentaria el conflicto de un grupo de renteros con los dueños de una gran finca salmantina a principios del siglo XX.
Un acontecimiento real
La muestra está inspirada en el libro de Macu Vicente Centeneros, que es un relato autobiográfico de lo sucedido en una finca de Vitigudino en 1901. Entonces la familia Luna Terrero hizo marcharse a los renteros de su finca para evitar las relaciones de la hija del dueño con un muchacho campesino. Aduciendo el impago de la renta, los campesinos fueron obligados a marcharse.
Un público activo
La propuesta de Patino es muy innovadora. En diferentes pantallas se muestran fragmentos de películas antiguas, de entrevistas con los descendientes, fotografías de la época y de las ruinas de lo que fue el palacete de la finca, etc. Esto permite al espectador componer el collage de la época, de acuerdo con sus experiencias; las pantallas no tienen un orden y corresponde al visitante aportar su coherencia personal. En palabras del cineasta: «Contar lo que pasó como una película de principio, nudo y desenlace no tenía sentido porque el trasfondo era mucho más rico. Ésta es la historia de la lucha de clases, de unos campesinos desterrados que levantaron un pueblo desde cero, pidiendo créditos para comprar tierras y material. Pasaron penurias, pero consiguieron liberarse de sus dueños para ser dueños de sí mismos»
Buenas críticas
La crítica ha alabado la muestra porque la considera fruto de un buen trabajo de investigación, porque convierte al espectador en parte activa y porque supone una mirada crítica al pasado de España.