“El Bosque arrasado: ¿seis meses para ésto...?”
La Plataforma para la defensa de El Bosque de Béjar critica los resultados a la conclusión del plazo de actuación previsto para el primer Programa Mixto de Jardinería
PDBB / Concluido el plazo de actuación previsto para el primer Programa Mixto de Jardinería destinado a obras en el BIC-Jardín Histórico El Bosque de Béjar, es el momento de hacer balance de sus resultados, tan inexistentes como los fondos públicos dilapidados para su puesta en marcha.
Así malgasta nuestro dinero el alcalde de Béjar y sus paniaguados: en seis meses de funcionamiento del Taller de Empleo o Programa Mixto de Jardinería, pomposamente bautizado con el nombre de "Duque de Béjar", han sido incapaces de llevar a cabo las obras proyectadas para El Bosque y las partes afectadas siguen pareciendo un patatal, como se aprecia en la fotografía panorámica, del 15 de abril, y en la fotografía que encabeza este artículo, del 28 de abril (compare el lector con las ofrecidas en denuncias anteriores, como la del 18 de febrero de 2018). Persistiendo en su demostrada incompetencia, han obtenido financiación para un nuevo taller de empleo ("Duque de Béjar II", claro) para seguir destrozando el lugar con nuevos desatinos.
Ya hemos explicado suficientemente las carencias y deficiencias del proyecto que dejaron a medias, redactado por el arquitecto José Carlos Sanz Belloso por encargo del Ayuntamiento de Béjar, ciertamente inadecuado para un BIC-Jardín Histórico del Renacimiento, diseñado con absoluta ignorancia de las claves compositivas del lugar y repleto de artefactos de obra y desquiciadas plantaciones en horror vacui, por lo que la mejor noticia para nuestra maltratada villa de recreo sería la paralización de los trabajos, el desmantelamiento de lo construido y, de inmediato, la restitución del lugar a su estado anterior al desastre, tal como se ha solicitado formalmente.
A la espera de ese feliz momento, lo que toca ahora es denunciar en público la incompetencia de los responsables de su ejecución, pues han consumido la dotación asignada al taller de empleo para unos resultados miserables, malgastando el dinero de todos. El primer proyecto para este taller se centraba en las dos grandes terrazas, en el espacio al norte del Palacete y en el invernadero, pero por motivos nunca aclarados por el Ayuntamiento ni por la Dirección General de Patrimonio, tuvo que realizarse un nuevo proyecto para reducir la intervención al espacio norte e invernadero, más la franja de terreno paralela al paseo norte del estanque. Este segundo proyecto no fue autorizado por el Órgano Competente hasta el 12 de diciembre de 2017, aunque el personal del taller de empleo ya arrasaba con el arbolado y elementos de fábrica un mes antes, incumpliendo la legislación aplicable al caso.
La innegable eficacia de este taller para destruir un Bien de Interés Cultural contrasta con su incapacidad para crear algo que merezca la pena, pues en estos seis meses todo sigue poco más o menos como estaba en noviembre de 2017: el espacio norte hecho una escombrera y sin perspectivas de recibir ajardinamiento alguno, la franja junto al paseo del estanque utilizada nada más que como solar para montar un invernadero de plástico y el invernadero antiguo en peor estado de conservación de lo que ya estaba (eso sí, se han desmontado las venenosas placas de Uralita que cubrían la mitad norte de su techumbre). Tal vez para compensar o para no echar a perder las plantas de flor adquiridas con nuestro dinero, se han dedicado a colocarlas en una serie de platabandas junto al muro divisorio entre el jardín y la Huerta de los Bojes (foto aérea de los jardines), un torpe arreglo floral de aficionados, enmarcado en bandas de grava blanca de efecto detonante impropio de un BIC-Jardín Histórico y, desde luego, nunca documentado en esta parte de El Bosque ni en ninguna otra. Por cierto, la plantación se realiza en un espacio no contemplado en el proyecto, lo que supone otra irregularidad que deberían explicar los responsables de la obra.
Lejos de aprender algo positivo de esta larga secuela de errores, nuestro alcalde se ha dado prisa en solicitar y conseguir nuevos talleres de empleo, igualmente con cargo a los mismos fondos públicos que se han dilapidado con el taller recién clausurado. No esperamos gran cosa del alcalde de Béjar, incapaz de aprender nada, pero los responsables de Patrimonio y de Empleo deberían ser más prudentes en permitir nuevos dispendios contra un Bien de Interés Cultural único en España, al menos con nuestro dinero.
Mientras se siguen perpetrando daños sobre este valioso ejemplar del Renacimiento, El Bosque va a permanecer cerrado al público más de un año (la suma de plazos de ejecución de los dos talleres de empleo sucesivos, a pesar de que no hay justificación alguna para ello), y las administraciones responsables siguen sin dar explicaciones ni respuesta a cuanto se le viene solicitando desde hace meses (en concreto el acceso a la información pública de proyectos y resoluciones), conculcando derechos de los ciudadanos: ¿qué es lo que oculta el contubernio Ayuntamiento- Dirección General de Patrimonio para cerrar y no soltar prend
PLATAFORMA PARA LA DEFENSA DE EL BOSQUE DE BÉJAR