El PSOE afirma que se suprimirán las líneas que no sean rentables
La Voz de Salamanca / El PSOE de Castilla y León emitió ayer un comunicado de prensa en el que defiende el proyecto de Renfe para Salamanca de supresión de líneas directas, ya que «mejorará la confortabilidad y los tiempos». En su comunicado, los socialistas no mencionan los aumentos de precios ni la más que probable reducción de horarios para comunicar Salamanca con Bilbao y Barcelona. Asimismo, Emilio Melero ha detallado «en el área de largo recorrido solo se van a mantener los tráficos que sean rentables». En cuanto a los transbordos, el procurador salmantino ha declarado que se intentarán evitar o minimizar en la medida de lo posible.
El PSOE también se ha mostrado muy crítico con el PP, al que acusan de acudir ahora a FEVESA, cuando normalmente intentan criminalizarles, llegando incluso a haberles demandado cuando se oponían a la subida de tasas municipales aprobada por el Ayuntamiento de Salamanca.
A continuación ofrecemos el comunicado de prensa íntegro del PSOE
Melero acusa al PP de “impudicia sin límites” por subirse al carro de las movilizaciones de FEVESA, colectivo al que ha criminalizado y denunciado ante la Justicia por ejercer derechos de ciudadanía
El PSOE se ha abstenido esta mañana en la votación de una demagógica y oportunista Proposición No de Ley presentada por el PP en las Cortes de Castilla y León, en la que pedía el mantenimiento directo de los trenes a Bilbao y Barcelona, y lo ha hecho porque el nuevo servicio ferroviario que plantea RENFE para llegar a Cataluña y el País Vasco acortará los tiempos y se realizará en trenes más confortables.
En su intervención, Emilio Melero, Viceportavoz del PSOE en las Cortes de Castilla y León y procurador por Salamanca, ha explicado que el nuevo servicio aprovechará las ventajas que ofrece la Alta Velocidad, y, por tanto, reducirá los tiempos a Barcelona y Bilbao. Además, ofrecerá a los ciudadanos un billete único desde Salamanca, que ampliará y mejorará notablemente la confortabilidad y la oferta hacia la cornisa cantábrica, Galicia y Cataluña, y que, efectivamente, contempla transbordos puntuales. El procurador salmantino añadió que, no obstante la aplicación de este nuevo servicio, el PSOE sigue trabajando para evitar o minimizar, en la medida de lo posible, los transbordos.
Al respecto, Melero recordó que, a partir de 2010, se liberaliza el transporte de viajeros, pudiendo cualquier operador circular por las vías, pagando el canon correspondiente al ADIF. Según la Ley de Sector Ferroviario, a partir de entonces, el Estado no podrá subvencionar el transporte de viajeros, excepto en el ámbito de Cercanías, y las Comunidades Autónomas solo podrán hacerlo de acuerdo a determinados criterios de rentabilidad social, de tal manera que, en el área de Media Distancia, el servicio va a estar muy supeditado a la dimisión que las Comunidades Autónomas quieran darle, estableciendo convenios con RENFE o con los operadores privados.
Sin embargo, según ha detallado Melero, en el área de largo recorrido solo se van a mantener los tráficos que sean rentables. Así, el procurador salmantino ha espetado al PP, abanderado de la reducción del gasto público, la incoherencia que, para su mensaje, supone saber que el déficit anual conjunto de los servicios directos Salamanca-Barcelona y Salamanca-Bilbao se eleva a 14 millones de euros, derivado de que, en 2008, el convoy Salamanca-Barcelona solo tuvo 11.265 viajeros, y el tren Salamanca-Bilbao, 37.817, lo que supone una pérdida de 5.000 pasajeros si comparamos los datos de 2005 con los de 2008.
Melero ha denunciado, asimismo, la hipocresía del PP, que no incluyó en el Plan Viaria de Álvarez Cascos la alta velocidad hasta Fuentes de Oñoro, ni el AVE Madrid-Salamanca, por Ávila, y ha tachado de “impudicia sin límites” el hecho de que los cargos públicos del PP se sumen ahora al carro de FEVESA en campañas de recogida de firmas y concentraciones, cuando el PP ha criminalizado y llevado ante la Justicia a este colectivo simplemente por ejercer sus derechos de ciudadanía.
Fuente: La Voz de Salamanca
